Reseña: Una Venganza Mortal

¡Hola! ¿Cómo están?. Hoy les traigo la reseña de la continuación de Una Obsesión Perversa:

Título: Una Venganza Mortal (Vengeful)

Autor: V. E. Schwab

Páginas: 512

Sinopsis:

Eli Ever y Victor Vale eran simples estudiantes de medicina cuando descubrieron que las experiencias cercanas a la muerte pueden, si se dan ciertas condiciones, manifestar capacidades extraordinarias.
Fueron muy amigos, luego rivales y, por fin, enemigos. Estuvieron muertos, revivieron, y más tarde Eli mató a Victor de una vez por todas.
Al menos, eso creía. Pero Sydney Clarke no estuvo de acuerdo y usó su propio superpoder para inclinar la balanza. Ahora, un trío se esconde en las sombras, mientras otro aprovecha la vida después de la muerte para apoderarse de la ciudad de Merit. Si puede haber vida después de la muerte, ¿habrá calma después de la venganza, o prevalecerá el caos?

 En esta oportunidad podemos apreciar tres historias que terminaran convergiendo. Por un lado tenemos a Víctor, Sydney y Mitch, los cuales se encuentran poniendo la mayor distancia posible entre ellos y Merit. Ahora que Víctor logro su venganza contra Eli y este último se encuentra preso, Víctor tiene otras cosas en las que preocuparse. Si bien Sydney logro traerlo a la vida con éxito no todo salió como esperaban.  Su poder está comenzando a fallar y una serie de episodios cada vez más frecuentes lo están llevando cada vez más cerca de su muerte definitiva.  La búsqueda de una cura en diferentes lugares hará que deje un rastro que lo pondrá en la mira de personas no deseadas.  Sydney se siente culpable por la situación de  Víctor  y hará cualquier cosa por reparar su error. Pero el no poder llevar una vida normal y el tener que mudarse constantemente comenzara a pesarle y el descubrir lo que de verdad  le sucedió a su hermana le hará dudar si seguir permaneciendo al lado de Víctor es la mejor idea.

Por otro lado encerrado en una instalación secreta en Merit se encuentra Eli. Un Eli que si bien cree que por fin se deshizo de su viejo amigo algo lo carcome por dentro. El fantasma de Víctor lo persigue haciendo que se plantee varias cosas. Y es en su confinamiento cuando aparece el detective Stell con una propuesta. Ahora Stell es el director de ONE una organización centrada en atrapar a personas ExtaOrdianarias como Eli. Y Eli lo ayudara haciendo lo que mejor sabe hacer rastrear y capturar otros EOs. Sobre todo una en especial que podría convertirse en un dolor de cabeza para ONE: Marcella Riggins.

Marcella era la esposa de un mafioso. Ella tenía todo lo que hubiera deseado hasta que una noche tras confrontar a su esposo Marcus por engañarla termina muriendo en un incendio o eso era lo que todos creían. Cuando vuelve en si en el hospital descubre que lo hace con un poder que la ayudara a cobrar venganza. Y la ayudara a obtener lo que siempre anhelo: poder. Marcella le mostrara a todos que es más que una cara bonita. Y junto con dos poderosos aliados pondrá de rodillas a Merit.

Debo decirles que ame este libro tanto y quizás más que el primero. No podía soltarlo y tuve que hacer un esfuerzo para que me durara un tiempo. Al igual que en el primero me encantó el hecho de que en realidad no hay buenos o malos. Todos tienen sus razones para actuar como lo hacen y la línea entre lo correcto e incorrecto se encuentra difusa dejándonos decidir hacia quien inclinar la balanza.

Me gusto ver cómo fueron evolucionando nuestro protagonistas durante el tiempo que pasa entre el final del primer libro y la actualidad. Además de conocer un poco más de su pasado.

La historia es dinámica con un ritmo de película y llena de acción. Con un final espectacular que te deja queriendo más.

Si no leyeron nada de Schwab les recomiendo que lo hagan porque por lo menos con estos libros no me defraudo. Yo por lo pronto tengo ya en mi lista de pendiente varios de sus otro libros y espero elegir uno de ellos pronto.

Puntos: 5/5 ☆

“Tal vez ella sí era de cristal. Pero el cristal es frágil solo hasta que se rompe. Entonces, es afilado.”

“No somos dioses, Eli. Pero jugamos a serlo.”

“Algunas personas eran como fósforos: un poco de luz y nada de calor. Otras eran como hornos, todo calor, pero poca luz. Y por último, muy raras veces, aparecía una hoguera, algo tan caliente y brillante que uno no podía acercar cele sin quemarse… Claro que, a la larga, incluso las hogueras se apagaban, sofocadas por sus propias cenizas.”